Tempori Cedo, Fernando García Murga

Título: Tempori Cedo
Título original: Tempori Cedo
Autor: Fernando García Murga
Páginas: 124
Editorial: AA ediciones
Colección: autoconclusiva


Sinopsis
A través de varias voces se reflexiona filosóficamente sobre los sueños, la escritura, la pobreza, la explotación humana, el yo, el tiempo, el trabajo, el miedo...

Opinión personal

En el funeral todo el mundo se preguntaba por qué gateaba Helena, pero la verdadera pregunta era por qué nos molestaba que Helena gateara.

Tempori Cedo es un viaje hacia otros mundos, un libro lleno de inventiva e historias muy cortas y emocionantes. Con algo de simniótica. Desde que lees la contraportada, y ese extraño y precioso título, el libro en sí te llama para que lo cojas del estante y lo leas.

Y aunque empecé a leerlo porque lo había escrito el padre de una amiga, desde las primeras páginas continué leyéndolo porque me encanta, es un libro que recomiendo que leas despacito, disfrutando de cada frase, ya que son muchas las frases interesantes que enmarcarías, y como ya sabréis, amo las frases literarias, a veces es hasta mi parte favorita del libro. También lo recomiendo porque no es un cliché, ni algoq ue puedas leer todos los días, es único.

Un día me hablaba de la simplicidad de lo complejo. Al día siguiente de la complejidad de lo simple. Un día se concentraba en la necesidad de lo aleatorio. Al día siguiente, en la aleatoriedad de lo necesario. Un día se preguntaba por la temporalidad de lo eterno. Al día siguiente, por la eternidad de la temporalidad.

Está escrito en primera persona, pero desde perspectivas diferentes de personas que no tienen nada que ver entre sí, habla de vacíos, de mareas humanas, matemáticas y macarrones, inocencia y, un par de veces, de amor, pero no muy optimista. Contiene metáforas, rimas, soledad, complejidad y filosofía humana. Engancha y no te suelta hasta que acaba y, a pesar de ser muy cortito, cuando lo terminas sientes que el mundo ha cambiado, aunque sea, un poco.

Hay una historia, mi favorita, que trata de una niña que saca cuentas, que todos los niños que hay en su colegio, y los multiplica por los nueve países que su padre conoce, que como él lo sabe todo, solo hay nueve países. De los quince mil niños, saca la conclusión de que ocho son muchos, así que ocho son los que pasan hambre en el mundo, y compra dos paquetes de macarrones para hacérselos a los ocho niños que, en el mundo, pasan hambre.

Yo no recuerdo lo que pasó mañana, que fue igual a lo que pasará ayer.

Esas inocencias de los niños pequeños son mis favoritas, y las más conmovedoras y tiernas. Aunque también, las de vidas de papel, desajustes metafóricos o vacíos oscuros de los que las personas no saben salir, son tristemente profundos y realistas.

Y como no hay ninguna cosa mala que decir sobre la novela, pasamos al final que, cómico e irreal, casi delirante, es perfecto para acabar con ello de la mejor manera posible. Estoy deseando que García saque su próximo libro, y estaos segur@s de que lo leeré con ansias.

...el pensamiento es libre. Libre para equivocarse. Libre para crear. Libre para dudar...

Puntos
5-5